Ingredientes
- 12 tortillas de maíz.
- 1 pechuga de pollo limpia y sin grasa
- 1 cebolla pequeña
- 1 diente de ajo
- 4 tomates rojos
- 2 chiles rojos
- 1 hoja de laurel
- 1 lechuga de tipo romana verde más claro y crujientes al centro.
- 1/2 taza de Crema
- Queso fresco blanco para adornar de tipo feta
- aceite neutro
Modo de preparación
- En una cacerola con agua caliente, cocinar la pechuga de pollo con sal y la hoja de laurel, hasta que la carne pegada. al hueso haya perdido el tono rojizo-rosado.
- Sacar la pechuga del agua y deshebrar la carne con ayuda de dos tenedores.
- Lavar los chiles y tomates. Abrir los primeros y quitar las semillas, el tallo y la vena blanca.
- Pelar la cebolleta y los ajos.
- Poner a asar el ajo, la cebolla, los chiles y los tomates.
- Una vez asados, meter todos los vegetales a licuar, con un par de buenas cucharadas de crema. Añadir un poco de sal.
- Si hace falta un poco de líquido para que la licuadora funcione bien, se pueden añadir algunas cucharadas del caldo en el que se coció el pollo.
- Después de licuar, probar y corregir la sazón, si es necesario.
- Pasar la salsa por un colador para quitar las semillas y que quede bien líquida.
- Verter la salsa en una cacerola y cocinar a fuego bajo.
- Mientras tanto, limpiar la lechuga y cortar tiras por el equivalente a dos o tres tazas.
- Disponer un par de cucharadas de aceite en un sartén, y dorar las tortillas previamente mojadas en la salsa (una a una, sólo un poco hasta que se suavicen).
- Rellenar cada tortilla con un poco de pollo y doblar.
- Disponer al menos 3 tortillas por plato. Se pueden cubrir con más salsa, al gusto.
- Cubrir con las tiras de lechuga, lo que reste de la crema de leche, y finalmente espolvorear con queso fresco.

