Tras la crecida sin precedentes del río Iguazú, el agua comenzó a bajar y las autoridades del Área Cataratas del Parque Nacional Iguazú esperan iniciar hoy la reapertura de los circuitos, que fueron cerrados en su totalidad.
Si bien continuaban las lluvias en el sur de Brasil, tanto en la cuenca del Paraná como la del Iguazú, el caudal era menor el martes en esta última a la altura de las Cataratas, y en bajante, indicaron a la Agencia Télam fuentes de la Administración de Parques Nacionales (APN) y de la concesionaria del área turística, Iguazú Argentina.
Esto trajo alivio en el sector comercial y del turismo de Puerto Iguazú, ya que al reactivarse el principal atractivo del lugar, estiman que no habrá cancelaciones de reservas hoteleras ni de excursiones y trabajarán también normalmente el rubro gastronómico y de entretenimientos, entre otros.
El primer circuito de las Cataratas del Iguazú en reabrir sería el inferior, expresó a Télam Ezequiel Bermejo, gerente de marketing de la concesionaria. El tramo siempre más afectado es el de las pasarelas al mirador de la Garganta del Diablo -el mayor salto de las Cataratas- que se extiende por más de un kilómetro sobre el río en el sector más caudaloso, y sobre el cual aún no se realizó una evaluación de daños.
El río Iguazú creció abruptamente a partir del sábado, cuando tuvo un leve aumento que llevó su caudal normal de 1.500 m3/s a 2.300, al domingo en que superó los 15.000 y se activó el Protocolo de Seguridad, tras lo cual ayer superaría los 45.000 m3/s, según precisó a Télam el presidente de APN, Carlos Corvalán.
Desde que comenzaron las mediciones del comportamiento del agua en la cuenca del Iguazú, la marca máxima registrada fue durante las inundaciones de 1992, con 36.000 m3/s, unos 10.000 menos que la medida actual.
Fuente: Télam.