Anoche al menos 66 personas resultaron heridas en el siniestro. Los más delicados son una mujer de 64 años, que sufrió un paro cardíaco, y un joven de 15 años con traumatismo de cráneo y estaría en estado crítico. El bombero tenía cortes y está estable.
Al menos 66 personas resultaron heridas anoche tras la explosión registrada en un depósito de la firma Raponi Industria Química SRL, ubicada entre las calles Avellaneda y Góngora, de barrio Alta Córdoba.
Como consecuencia del siniestro dos de los lesionados se encuentran graves, ambos internados en el Hospital de Urgencias de la ciudad.
Se trata de María Angelina Cueto, de 64 años, que sufrió un paro cardíaco y se fracturó la primera y segunda vértebra cervical, sufrió también fractura de costilla y traumatismo de tórax, por lo que se encuentra estable pero con respiración asistida.
El más grave es Pablo Amaya, un chico de 15 años que tiene un fuerte traumatismo de cráneo encefálico y está luchando por su vida. El adolescente se encuentra en coma farmacológico con pronóstico reservado. Familiares de Pablo esperan un milagro y piden a los cordobeses que recen por él.
Otro herido pero de menor gravedad es el bombero Fredy Ferreyra, de 30 años, quien está internado en el Policlínico Policial por heridas cortantes en cuero cabelludo y escoriaciones varias, pero se mantiene estable.
Desde el Ministerio de Salud de la Provincia informaron que de las personas asistidas con los equipos de emergencias, “en su mayoría fueron pequeñas lesiones”, problemas respiratorios leves o ataques de nervios. Además, indicaron que el operativo sanitario seguiría durante todo el día.