El sueño de ambos tenistas argentinos perdura en el polvo parisino, luego de sendas victorias frente a dos jugadores locales. El cordobés superó a Correntin Moutet y el correntino a Nicolas Mahut.
El de Jesús María tuvo que transpirar y batallar para sacar su boleto a la siguiente instancia, tras vencer en cinco sets por 2-6, 6-3, 6-4, 5-7 y 6-4 al joven jugador de 20 años en 3h 28m de juego.
Cada uno sabía que se estaban jugando una gran chance que no suele suceder a menudo. Con un nivel tenístico parejo, el manejo de los momentos importantes fue clave. Los grandes tenistas imponen su jerarquía en esos pasajes de los partidos. Aquí la poca experiencia por lado tornó al match cambiante y emotivo.
Desde lo estadístico hay un reflejo claro de la paridad que se dio dentro de la pista. Quedándose el topo con la misma cantidad de puntos que su rival, 152, sabiendo administrarlo de mejor manera para terminar obteniendo el triunfo. En tiros ganadores anduvieron también muy similar, consiguiendo el argentino 53 sobre los 56 de su oponente. En errores no forzados, Juan Ignacio cometió apenas cuatro menos que Correntin (52 sobre 56). Inclusive en la cantidad de rupturas de saque, fue la misma cifra, seis por lado, variando sólo la efectividad de las chances aprovechadas (6/17 para Londero, 6/14 para Moutet).
El francés, a pesar de la derrota, le sacó jugo a la invitación recibida para disputar el torneo, llegando hasta la tercera ronda y obteniendo valiosos puntos para el ranking. En cuánto al argentino, deberá enfrentar nada menos que a uno de los favoritos del certamen, el español Rafael Nadal, quién batió al belga David Goffin por 6-1, 6-3, 4-6 y 6-3.
El correntino, por su parte, mostró mucho carácter al imponerse al veterano de 37 años proveniente de la clasificación, ubicado actualmente 252° del mundo. En cuatro parciales por 3-6, 7-6 (3), 6-4 y 7-6 (3) tras 3h 27m de partido, venció Leo a su oponente. El público jugó su papel para mantener encendido al local, quién en momentos parecía mostrar algunas falencias en los aspectos físicos, sin embargo, no incidieron en el juego. Manteniéndose el N°68 del mundo, bajo indicaciones de su banco, focalizado nada más que en el encuentro, para no perder la concentración y centrarse en sí mismo.
Desde lo numérico, fue el yacaré quién marcó una superioridad, logrando 22 winners más (69 sobre 47) y siete equivocaciones menos que su contrincante (37 sobre 44). Sin embargo, no pudo volcar en el score esa diferencia, tomando solamente 2 de las 14 oportunidades que dispuso para quebrar (14%), consiguiendo su oponente las mismas rupturas sobre las tres ocasiones con las que contó (66%).
En la próxima instancia, el duelo que le espera al tenista de Corrientes es de una dificultad extrema, deberá enfrentarse contra Roger Federer. El suizo derrotó al noruego Casper Ruud por 6-3, 6-1 y 7-6 (8).
