
La pareja, el pasado viernes acudió al domicilio en busca de los hijos del jugador y la modelo. El mismo defensor se los entregó y podía palparse la tensión en el ambiente. Te mostramos las imágenes.
La noche del viernes 6 de junio, Wanda Nara fue en buscar a Valentino, Costantino y Benedicto a la casa de Maxi López en Puerto Madero, acompañado por su esposo, para que sus hijos participen de la boda programada para el 7 de junio.
Al delantero de la Sampdoria (quien no seguiría en el club a partir de julio) no le gustó nada que la modelo se presentara en su propia casa de Puerto Madero con nuevo marido, pero puso su mejor cara de poker para evitarles el disgusto a los chicos.
Al día siguiente, se concretó la fastuosa boda. Y el domingo llegaría el escándalo, con denuncias cruzadas: de Maxi contra Wanda por «impedimento de contacto» y de Wanda contra Maxi por «violación de domicilio». Como presagiaban las fotos que tomó la revista Caras dos días antes, la tensión se sentía en el aire.