El Potro cordobés nació el 24 de mayo de 1973 y desde los 12 años deslumbró con su llamativa y apasionante forma de cantar.
Logró ser reconocido a nivel nacional en tan sólo meses y a nivel mundial puso el cuarteto en las radios de miles de ciudades.
Pero en su mejor momento, la tragedia tocó su puerta.
En la madrugada del 24 de junio de 2000 en un accidente vial sucedido en el sur del Gran Buenos Aires (Berazategui), falleció el cantante.
En ese momento tenía 27 años y era el solista musical más convocante, más venerado, más febril.
Nadie podía creerlo, el dolor invadió el país y los miles de seguidores y fanáticos no encontraban consuelo alguno ante semejante noticia.
Esa madrugada del 24 de junio, Rodrigo volvía de tocar en el boliche Escándalo en City Bell, La Plata, cuando la camioneta que manejaba chocó con el vehículo que conducía Alfredo Pesquera (declarado inocente por la justicia). Además de Rodrigo, en el accidente falleció Fernando Olmedo.
En el lugar de su muerte, en Berazategui, levantaron un santuario donde sus fanáticos pueden llorar su ausencia. Rodrigo Alejandro Bueno tenía 27 años cuando murió.
Este año, a quince años, su querido amigo Tota Santillán quiso rendirle homenaje con una estatua en la que se lo ve con la cantante tropical Gilda pero parece que no tuvo respuesta alguna por parte del gobierno de la ciudad.
Estaba Armando esto para mañana llevo 3 meses quise ponerlo en la ciudad de bsas lo llame 15 veces a Larreta nada pic.twitter.com/jS48SCduv6
— tota santillan (@TotaSantillan) junio 23, 2015

