Se trata de Mariano Cabral. Diego Bermúdez Bringe, Gabriel Graves y Alejandro Balado, quienes más allá de que su patrona está presa, fungen como secretarios en el Congreso y el Consejo de la Magistratura. Cuánto cobran.
Tras la prisión domiciliaria de la expresidenta Cristina Kirchner, sus secretarios personales se encuentran impedidos de tener contacto con ella debido a las restricciones de visitas al domicilio en donde cumple su condena, en San José 1111. Solo pueden visitarla familiares, médicos y sus abogados.
Sin embargo, estos secretarios: Mariano Cabral, Diego Bermúdez Bringe, Gabriel Graves y Alejandro Balado, no se quedaron sin trabajo, sino que su patrona les aseguró lugares en el Congreso Nacional y el Consejo de la Magistratura como secretarios.
Pleno empleo
Esta continuidad laboral dentro del Estado, con la consecuente percepción de haberes sobre la base del erario público, les fue asegurada a la salida de Cristina Kirchner como vicepresidenta y presidenta del Senado al finalizar el mandato de Alberto Fernández como presidente.
Mariano Cabral funge como secretario personal de la presidenta del Partido Justicialista desde 2014. Cuando CFK pasó a controlar el Senado al ser vicepresidente de Alberto Fernández, se lo nombro prosecretario de la Cámara Alta. Tras finalizar el mandato del gobierno peronista, su patrona le aseguró un puesto como funcionario del Consejo de la Magistratura de CABA.
A su vez, Diego Bermúdez Bringe también se desempeñaba como funcionario en el Senado durante el mismo periodo, y tras finalizar el mismo se lo destacó como prosecretario del bloque senatorial de Unidad Ciudadana, presidido por la senadora kirchnerista Juliana di Tullio.
Gabriel Graves es secretario personal de CFK desde 2015, y tras finalizar el mandato de la ex vicepresidenta de Alberto Fernández en tanto presidenta del Senado, pasó a planta permanente como funcionario de esta cámara legislativa. La misma suerte le tocó a Alejandro Balado, pero en Diputados.
Cuánto cobran
Cabe destacar que los sueldos base que cobran los prosecretarios y secretarios del Consejo de la Magistratura rondan entre los 3 y 4 millones de pesos mensuales, mientras que los prosecretarios del Congreso alcanzan los 2 millones de pesos.