Handball : Los Gladiadores se despidieron de Rio 2016

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El seleccionado masculino de handball cayó 22-18 contra Qatar y no pudo meterse entre los ocho mejores.

Se había escapado la ilusión de Los Gladiadores de pasar a los cuartos de final en los Juegos Olímpicos por el 22-18 ante Qatar, el subcampeón mundial, y de la Arena do Futuro nadie se iba. Ni los jugadores, entre abrazos, consuelos y palabras íntimas, porque a muchos se les fue su último ciclo olímpico. Ni los hinchas argentinos, en inferioridad ante un estadio repleto de simpatizantes repentinos de Qatar. El seleccionado que renovó el impulso al handball en el país se despidió con dignidad luego de un torneo durísimo. Y ahora habrá que volver a empezar.

Frente a un equipo argentino de menor potencia física pero con un gran corazón por vestir la celeste y blanca, estuvo un seleccionado multinacional, integrado por dos montenegrinos, dos bosnios, un croata, un francés y un español. Todos nacionalizados por el poder de un país que se quedó con la sede del Mundial de handball de 2015 y del Mundial de fútbol de 2022. Contra ese equipo perdieron Los Gladiadores.

Con el estadio en contra, Argentina perdía 3-0 en los primeros cinco minutos hasta que Federico Pizarro comenzó a hacerse fuerte en el ataque para convertir cuatro goles en los 30 minutos iniciales. El primero fue en suspendido y luego de una tapada de Schulz a Megdich, Carou descontó con su media vuelta tradicional en el eje del semicírculo para el 2-3. Se necesitaba la zurda de Federico Vieyra y la soltó para el 3-5. Se necesitaba más.

Con Carou castigado dos minutos afuera, Argentina aprovechó una mala entrega qatarí y Pizarro castigó para el 4-6. Pero cada vez que la Selección intentaba, Qatar se despegaba con sus variantes y su poderío físico. Y así fue como quedó 8-4 luego de que la pelota pegara en un palo y en la espalda de Schulz para meterse en el arco argentino.

Entonces llegó la remontada nacional, con el estadio en silencio. Porque una cosa es alentar a un seleccionado del país y otra es hinchar en contra de Argentina. Vieyra, Pablo Simonet y Pizarro, desde el extremo y hacia el segundo palo, anotaron para que la Selección quedara a un gol de Qatar. Pizarro volvió a convertir, esta vez con un jugador menos, para quedar 8-9 y entonces llegó el show de los arqueros Schulz y Saric.

El cierre no fue bueno para Los Gladiadores, porque después de que el Colo Vaistein castigara para el 9-10, Qatar marcó un parcial de 3-0 que no pudo cortar Federico Fernández a cuatro segundos del final en una jugada preparada. Una pena.

El palo izquierdo y Saric volvieron a negarles goles a Federico Fernández y Vaistein, pero Pablo Simonet dio cátedra en dos jugadas y dos zurdazos de Vieyra le permitieron a Argentina entrar en partido y quedar 13-15 a los 9 minutos. Megdich estiró la ventaja qatarí por entre las piernas de Schulz y le pedía aliento a los brasileños. Los que alentaban eran los argentinos. Hermoso clima.

Federico Fernández erró un penal y el público local aulló con un “¡Olé, olé, olá, Qatar, Qatar!”. Por suerte se lo puede contar, para que se lo crea. Y la Arena do Futuro explotó cuando Federico Fernández dio mal un pase y en un santiamén los asiáticos quedaron 18-14. La infernal “rosca” que sacó de la galera Pablo Simonet animó a los argentinos, pero Memisevic se hizo fuerte entrando por el eje y Capote fue certero de nuevo para que Qatar ganara 21-16 a los 22 minutos y comenzara a definir la historia.

Encima el arquero Saric hacía lo posible por demoler anímicamente a Los Gladiadores con sus atajadas. Y la clasificación a los cuartos se final se vio languidecer. Y hubo adiós del torneo olímpico. Y abrazos. Y gracias al público. Y algunas lágrimas, ¿por qué no? Si cuando afloran desde el alma tienen sentido de liberación.