Chichizola atajó un penal agónico y fue la gran figura del 3-2 con el que los de Ramón Díaz se subieron a la punta del Torneo Final, compartiendo el lugar con Gimnasia. Cavenaghi hizo dos (uno de Taco) y Carbonero el restante, mientras que De Paul y Hauche anotaron para la Academia.
River ganó uno de esos partidos que valen un título. Sí, aunque el Millonario no salga campeón, hoy la sensanción es que el equipo de Ramón Díaz se va a quedar con el campeonato. Gimnasia apenas empató con Lanús y el triunfo de River ante Racing, y de la manera en que se dio, pone a los de Núñez como máximos candidatos a quedarse con el Torneo Final. Chichizola fue el héroe…
El partido arrancó al mismo que tiempo en que se iniciaba la segunda parte en La Plata. Con una oreja en El Bosque y un ojo en el Monumental, los hinchas de River seguían ambos partidos con la esperanza de que la noche terminara de la mejor manera. Y así fue. Claro que para eso debieron sufrir, y mucho.
Los de Ramón Díaz se pusieron en ventaja por medio de un penal que Campi le cometió a Villalva(un empujoncito, pero falta al fin) y que Fernando Cavenaghi cambió por gol a los 25 minutos. Racing, fiel a la filosofía de su entrenador, no salía ni aún en desventaja. De todas maneras, llegó a la igualdad por medio de Diego Villar, quien de cabeza y tras un centro de Rodrigo De Paul puso el 1-1.
Cuando parecía que se iban el vestuario en tablas, Carlos Carbonero le rompió el arco a Sebastián Saja con un violento derechazo desde la medialuna. El arquero de Racing podría haber hecho algo más, aunque en la repetición se ve cómo Rojas obstaculizaba la vista del Chino. Era posición adelantada, aunque difícil de apreciar.
El segundo tiempo comenzó con un River muy tranquilo dominando las acciones y los tiempos del partido. La Academia seguía jugando en su campo y esperando algún contraataque para lastimar. A los 9, una buena pared entre Carbonero y Lanzini terminó con centro atrás del colombiano para un Cavenaghi que, de taco, puso el 3-1 que parecía liquidar las cosas.
Pero a Racing le quedaban vidas para gastar. Cuando parecía que el local había cerrado el partido, una contra lo agarró mal parado y Gabriel Hauche aprovechó para poner el 2-3 y reavivar las esperanzas de un equipo que nunca hizo nada para intentar empatar o llevarse la victoria. El nerviosismo invadió el Monumental, que ya sabía del empate del Lobo, y sobre el final llegó el verdadero sufrimiento para los hinchas millonarios…
Jonathan Maidana lo bajó a Viola y vio la roja. De esa falta, vino un centro de De Paul para Cahaisque Rojas increíblemente rechazó ¡con el puño! Abal cobró penal y ahí fue Saja, en el minuto 93, a patearlo. Pero en esos momentos es que aparacen los hombres, y el héroe volvió a ser Leandro Chichizola, que le atajó el penal al arquero de Racing tal como había hecho ante Estudiantes hace un par de fechas.
Fuente: goal.com
