La Municipalidad de Córdoba resolvió postergar hasta el 27 de octubre la apertura de sobres para concesionar el servicio. Originalmente debían abrirse el viernes próximo.
Algo «huele mal» y no es precisamente por la basura. La Municipalidad de Córdoba postergó hasta el 27 de octubre próximo la apertura de sobres de la licitación para concesionar el servicio de recolección de residuos sólidos urbanos de la ciudad de Córdoba, que originalmente debían abrirse el viernes próximo.
La decisión, informada por medio de la nota aclaratoria Nº 2, fue dispuesta «a solicitud de las empresas consultantes». No obstante, fuentes al tanto del proceso afirman que también estuvo vinculada con el «ruido» político que podría acarrear un proceso en el que hay verdaderos «pesos pesados» disputándose un negocio a 10 años vista.
Este rumor empezó a surgir cuando se conoció que entre las anotadas hay compañías que estarían vinculadas con Hugo Moyano, por lo que hablan de una fuerte puja gremial en vísperas de las elecciones generales de octubre, según informaron fuentes al tanto del proceso al medio Comercio y Justicia.
Es conocida la tajante diferencia entre ese gremio y el Sindicato Único de Recolectores de Residuos y Barrido de Córdoba (Surrbac), situación que podría desencadenar disputas y denuncias cruzadas en la previa de la campaña electoral, afirman los informantes.
Desde el municipio, por su parte, descartaron que la prórroga tenga que ver con ese tipo de situaciones aunque admitieron que la coincidencia respecto a que la apertura de sobres haya sido fijada -ahora- para después de los comicios, alimenta esa hipótesis lógica a los efectos de interpretar el porqué de la postergación.
Mientras tanto, a las empresas que ya mostraron su interés por participar de la compulsa ahora se sumaron otras dos: la española Urbaser y la peruana Petramas. Ambas aparecen también anotadas en el proceso iniciado por la Corporación Intercomunal para la Gestión Sustentable de los Residuos del Área Metropolitana Córdoba (Cormecor) para la construcción del denominado Complejo Ambiental Córdoba que reemplazará al actual predio de enterramiento de Piedras Blancas.
A esas compañías se suman LUSA y Cotreco, ambas prestatarias del servicio en la ciudad desde marzo de 2012. También están en carrera la empresa Impsa, del grupo Pescarmona; LimpAR, del grupo Vega-Caputo, y Ecohabitat-Emepa, que en el ambiente se la relaciona al camionero Hugo Moyano.
Tanto Impsa como Ecohabitat tienen adjudicadas zonas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Por su parte, LimpAR que se adjudicó tiempo atrás el servicio de recolección en la ciudad de Rosario, está formada por la conjunción de Vega Engenharia Ambiental, de origen brasileño, y Caputo Saic y F, relacionada a Nicolás Caputo, amigo personal del presidente Mauricio Macri.
Con la prórroga dispuesta por el municipio, también se pospusieron los plazos para acceder a los pliegos y participar del concurso. Concretamente, según la nota aclaratoria Nº 2, la fecha límite para retirar la constancia de adquisición de pliegos será ahora el 5 de octubre mientras que, para la solicitud de consultas, el límite será el 12 de octubre.
En tanto, la apertura de sobres ser concretará el viernes 27 de octubre a las 12. Se trata de un negocio de 13.894,2 millones de pesos en ocho años a valor presente. El monto original por mes será de 144 millones de pesos, que luego se irá actualizando en función de la suba de costos que surgirá de una polinómica incluida en los pliegos.
Los pliegos de licitación, que pueden consultarse de manera gratuita en la página web de la Municipalidad de Córdoba, avanzan en los detalles del futuro servicio que se concesionará a ochos años con posibilidad de dos años de prórroga. A diferencia del actual servicio, la ciudad se dividirá en tres zonas: micro y macrocentro, norte y sur.
La prestación futura incluirá la recolección habitual, además de ampliar toda la ciudad la diferenciada, uno de los temas pendientes. También se prevé avanzar con la contenerización de los residuos, primero con la zona céntrica y, luego, en los barrios. Los futuros adjudicatarios se harían cargo del negocio recién a partir del año próximo.
Un proceso aún inconcluso
Después de la conclusión del contrato de concesión con Cliba (grupo Roggio), el entonces intendente Daniel Giacomino licitó la prestación
No obstante, ese proceso fracasó por denuncias de cartelización de los oferentes. Entonces, el ex intendente resolvió crear Crese, empresa estatal que se hizo cargo del servicio.
A poco de asumir, Mestre tercerizó el servicio hasta tanto se licitara la prestación. Hubo un intento fallido y ahora se apunta a concluir el proceso.
Fuente: Comercio y Justicia